Diecinueve trabajadores murieron en una avalancha de tierra que se tragó una fábrica de ladrillos en la provincia de Shanxi, según informó ayer la agencia oficial Xinhua.
Los servicios de emergencia explicaron que el alud destruyó las instalaciones de la empresa y atrapó a más de 20 empleados, de los que de momento sólo uno ha podido ser rescatado con vida.