Conservar los manglares y sus riquezas pudiera convertirse en una fuente de ingresos aún no explotada para los residentes del distrito de Chame, aunque ello implica un cambio de conciencia hacia la protección de la naturaleza y los muchos beneficios que ésta pude devolver; además de capacitación.
La opción de optar por el ecoturismo en esta zona en vez de continuar desvastando es una de las planteadas en el Proyecto De Conservación Y Repoblación De Áreas Amenazadas Del Bosque De Manglar Del Pacífico Panameño (Anam - Oimt), el cual se está ejecutando en la Bahía de Chame.
PLAN A SEGUIR
Este plan abarca además a las zonas de Monte oscuro en el distrito de Capira, Sajalices, Espavé y El Líbano en el distrito de Chame.
La intención, según se indica en el documento, es beneficiar a la población local e integrarla al turismo de bajo impacto, como una alternativa viable y sencilla para contribuir a evitar la destrucción del manglar.
Además de aprovechar elementos de los manglares como son los recursos escénicos en su vegetación, su fauna marina, (Aves, peces, ostras y otros bivalvos, cangrejos, cocodrilos) en sus espacios reforestados, en sus albinas y bosques achaparrados, en sus rodales de Avicenias, en sus estrechos senderos con mangle "pasmado" (Rizophora racemosa) como en el conocido "Ferri" que protege las orillas del manglar.
MIRADORES
En los cerros aislados que pueden utilizarse, bien equipados, como puntos de observación o miradores, sitios de descanso y merenderos, islas con aves marinas y playas en Punta Chame.
Otros elementos incluidos en el conjunto de atractivos para quienes gustan del ecoturismo son el origen volcánico de la zona, con dos calderas erosionadas del Terciario de antiguos Volcanes, incluyendo el Cerro Trinidad en el Parque Nacional Campana. Los sedimentos del manglar son de origen marino fluvial del Cuaternario.
La comunidad muestra orgullo al mencionar que el nombre de Chame proviene de un antiguo cacique.
En uno de los apartados de este programa están plasmadas las condiciones para viabilizar el ecoturismo en el manglar de Chame, y permitir que los potenciales turistas puedan entrar a conocer el interior del manglar , con el mínimo riesgo y sin alterar el piso natural.
Una de las ideas es que se podría iniciar una pequeña empresa con un bote con motor fuera de borda, con capacidad para 12 personas o visitas por día durante 100 días al año y que pudiera crecer hasta cinco botes por año como máximo, con un motorista y un guía turístico por bote. Bien administrado, un primer bote podría pagarse en un primer año. Para ello se hace indispensable, como se anota en el Proyecto De Conservación Y Repoblación De Áreas Amenazadas Del Bosque De Manglar Del Pacífico Panameño, establecer relaciones con distintas asociaciones, gremios e instituciones, incluyendo hoteles y agencias de viaje podrían viabilizar esta microempresa.