Un día que andaba en el campo me encontré con Jesús, Tomándome de la mano me dijo: Manuel caminemos y echemos un vistazo por el mundo.
Después de algunos minutos de caminata pudimos ver un mundo lleno de injusticia y desigualdades. Un mundo en el cual reina el odio y la violencia, un mundo en el cual los vicios, placeres y enfermedades venéreas están a la orden del día. Un mundo en el cual impera el caos y donde no existe el respeto a la vida.
A mitad del camino vimos venir a una gran muchedumbre; estos eran jóvenes que se encontraban perdidos y alejados del amor de Dios. Jóvenes que caminan arrastrando cadenas. Cadenas que los mantienen atados a la mediocridad y a la miseria humana, ya que dejaron de existir para la sociedad; jóvenes con hambre y sed de justicia; jóvenes que no sueñan, ya que alguien les robo sus sueños. Jóvenes que desconocen de la existencia de un Dios liberador, debido a la escasez de Sacerdotes, Pastores y líderes capaces de dejarlo todo para salir en busca de estas ovejas perdidas.
Al ver todo esto, Jesús me miraba entristecido y me preguntaba una y otra vez, ¿Manuel que le han hecho a mis hijos? Porque tanto odio y sufrimientos entre ellos, ¿Porque tanta hambre y miseria? si este no es el plan que yo tenia destinado para ellos. Al final del camino, al ver a Jesús llorando de Amor y sufriendo por cada uno de nosotros me atreví a preguntarle: ¿Maestro que quieres que haga? Dime que puedo hacer para hacerte sonreír. En ese momento volteando su rostro hacia mí y con un fuerte abrazo me dijo: apacienta mis ovejas. Fue en ese preciso momento en que decidí emprender esta aventura la cual le puse por nombre: "Una Aventura llamada Jesús", que no es otra cosa que el entregarse sin medida al servicio de los demás, amando y sirviendo sin importar a quien. Solo por amor a aquel que nos amo hasta el extremo.
Finalizo este mensaje con esta interrogante:
¿Estás dispuesto a construir sobre lo destruido, a amar sobre todo odio, ira y rencor, a salir en busca de cada uno de estos jóvenes?
Joven! Haz la prueba y veras que bueno es El Señor, atrévete a ser la diferencia, a ser luz para aquellos que caminan en valles de sombra y de muerte.
Que este mensaje sea de provecho en tu vida, te haga tomar conciencia de la realidad que estamos viviendo y que El Rey Jesús derrame sobre ti y sobre los tuyos bendiciones en abundancia.