La Rabia bovina es una enfermedad mortal de los mamíferos o animales de sangre caliente, que incluso puede afectar a los seres humanos.
Se ha comprobado, que además de las pérdidas considerables de sangre en los animales, esto causa disminución de peso (carne) y leche, y por ende, pérdidas económicas cuantiosas a los productores.
Considerada como una encefalomielitis viral aguda, cuyo virus se encuentra usualmente presente en la saliva de los animales infectados y es transmitida por la mordedura de éstos.
En ésta, los vampiros hematófagos tienen una notable responsabilidad, por lo que ante los ataques de estos animales, es necesario su control y captura, en el que la utilización de redes juega un papel importante.
Panamá por su condición geográfica, su fauna y flora silvestres, ha sido considerada por los conserva- cionistas como un paraíso tropical. No obstante, esta misma naturaleza ha establecido algunas barreras en cuanto al uso adecuado de algunos tipos de esta redes, que contribuyen en el control de los murciélagos hematófagos.
Desde 1974, la Dirección Nacional de Salud Animal, del Ministerio de Desarrollo Agropecuario, ha llevado a cabo un Programa Nacional de Capturas de Hematófagos, donde el principal objetivo ha sido la eliminación de este transmisor de rabia.
Los murciélagos, por su naturaleza, son una especie muy sensible al sonido, lo que hace de las redes el método ideal para este tipo de actividad.
Si bien la vida de uso de estas redes, tiene un período de 10 capturas en promedio, éstas tienen la resistencia necesaria si son bien cuidadas y atendidas por los médicos veterinarios y sus asistentes.
Su uso puede ser para atrapar otras especies de pájaros exóticos y de aquí se desprende este compromiso con los organismos internacionales, así como también la seguridad de que su utilidad será exclusivamente, para el control del vampiro hematófago.
Actualmente, los casos de rabia han disminuido en la geografía nacional, a tal punto que en lo que va de este año 2007, sólo se ha reportado un caso como positivo en laboratorio (Rodeo, Cermeño, Región Oeste).
Los constantes ataques a los animales y seres humanos han provocado pánico entre los moradores de diferentes áreas; su control debe ser inmediato y oportuno.
La compra anual de las redes siempre ha superado las cien, pero aún nos queda un compromiso en conjunto con los ganaderos, de mantener un control estricto de este peligroso mamífero transmisor de una de las enfermedades más mortales, la cual no tiene cura, conocida en el mundo entero como la Rabia Silvestre.