"Diez negritos" o "And then there were none", su título en inglés (también conocida como "Ten Little Indians" y originalmente "Ten Little Niggers"), es una de las maravillosas novelas de ciencia policial de Agatha Christie.
En la obra, nacida al mundo en 1939, se describe, con la maestría de una reina del género policivo, a diez personas que son invitadas a pasar unos días en una isla deshabitada.
Quien debe ser el anfitrión, nunca aparece, y los diez invitados son uno a uno asesinados, aumentando el misterio.
Para ello, se siguen las ingenuas instrucciones de una canción de cuna ("Eran diez negritos..."), la que da el título a la novela.
Todos reunían argumentos, como para ser culpables; todos, sin embargo, tenían una coartada válida.
Cuanto más se acercaba el final de la obra, más inaccesible a la razón se volvía el tramado de la apasionante novela.
El sábado, en la Liga Española, que parece surgida por la trama y el suspenso de la pluma magistral de la novelista británica, cayó uno de los negritos.
Claro que ya se sabe quién fue "el asesino". El imprevisible Villarreal, como visitante, se deshizo con un sonoro 2-3, del Valencia, y terminó con la ilusión de los de Mestalla, de alcanzar al Real Madrid y al Barcelona, en el tope de la tabla de posiciones.
Los dos rivales tenían motivos válidos para alzarse con el triunfo: el onceno valencianista ser el vencedor del campeonato, y el "submarino amarillo" sumarse el próximo año a la Copa de la UEFA.
David Villa, de penal a los 21', y Emiliano Moretti a los 90' marcaron para el Valencia. El uruguayo Diego Forlán a los 35' y 87', y el danés Jon Dahl Tomasson a los 79' anotaron para el Villarreal.
Mientras tanto, el Real Madrid se aproxima al campeonato, con su victoria 3-1 (Sergio Ramos, Raúl y Rud van Nistelrooy) ante el Deportivo La Coruña, que descontó por medio de Joan Capdevila.
El Barça ganó ajustadamente 1-0 al Getafe, en el Nou Camp. El gol catalán fue de Ronaldinho, que vio tarjeta roja y no estará en el "derby" con Espanyol.
Mientras, en la isla de la Liga, otro "negrito" (¿Sevilla?, ¿Real Madrid?, ¿Barcelona?) se prepara para caer, al mejor estilo de la ronda policiva de la señora Agatha Christie.