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Refinería Panamá, realiza estudios para determinar si estos olores provienen de sus instalaciones. Mientras que, Cemento Panamá aplicará un nuevo mecanismo para que el polvo no afecte a los habitantes de Nuevo San Juan y alrededores. Foto Archivo  |
Los habitantes del corregimiento de Cativá están preocupados por los fuertes olores a combustible que se perciben en la región, principalmente en horas de la noche, cuando semanas atrás dos docenas de personas fueron afectadas con náuseas y vómitos, mientras que en Nuevo San Juan sigue la cobertura de la vegetación por el polvo que emana de la planta de Cemento Panamá S.A.
En barriadas como San Pedro, Guayabal, San Martín, Villa Guadalupe, Nuevo Méjico y Puerto Pilón es común percibir un fuerte olor que no deja dormir a sus pobladores y que es común en los primeros meses del año.
David Guerra, residente en Villa Guadalupe indica que es desagradable el olor que afecta a sus sobrinos de 5 y 3 años, debido a que su vivienda está en un punto alto, por lo que son afectados con mayor fuerza.
Para él, los olores parecen originarse en la planta de la empresa Refinería Panamá, ubicada en Bahía Las Minas a un kilómetro de la carretera Transístmica, pero esto parece raro, porque se percibe siempre en época de verano.
Igual otros residentes de San Pedro A y B siempre han denunciado la situación, sin embargo, el problema se resuelve temporalmente y luego se profundiza.
El otro problema ambiental que viene desde hace décadas es la palpable contaminación de toda la rica vegetación de Nuevo San Juan por las partículas de polvo blanco que la cubren y que salen de las plantas industriales de elaboración de cemento en la mencionada empresa.
Problemas respiratorios afectan a los pobladores de la región, quienes para el efecto han organizado un comité el cual ha entablado conversaciones con la empresa que se ha comprometido ha colocar los filtros que eviten la salida de partículas.
Este frente espera resultados positivos que paralicen los efectos de contaminación y se pueda sanear el sector.
A esto se suma la preocupación de algunas familias de Sardinilla, quienes han visto en peligro sus viviendas debido a las explosiones que realiza la empresa para la búsqueda de material para la elaboración de cemento, lo que ha ocasionado rajaduras en las estructuras.
POSICION DE LA ANAM
Para el director regional de la Autoridad Nacional del Ambiente (ANAM), Estuardo Carrasco se está convocando a las empresas ubicadas en el sitio para poder identificar cuál es el problema y de dónde viene, porque es evidente el fuerte olor azufre.
Carrasco dijo que pudiese ser algún tipo de combustible que se requiere ó el petróleo dependiendo de su concentración de azufre, pero advirtió que no aseguran que esto sea así hasta tanto se identifique realmente que ocurre.
En el área de Bahía Las Minas, Cativá a parte de la Refinería Panamá S.A., se encuentra la planta de generación eléctrica de la empresa Bahía Las Minas Corporation y un centro del almacenaje de la compañía Panagas.
El funcionario señaló que hay que ubicar el problema y encontrar una situación porque dijo comprender las molestias que causa a los pobladores cercanos al área y hasta los conductores que transitan por la Vía Transístmica entre Cativá y Sabanitas.
Carrasco adelantó que han solicitado elaboren un plan de adecuación y manejo ambiental y que lo mismo harán con las otras empresas establecidas en el sector, peor lo importante es eliminar esta incomodidad.
A raíz que los olores se perciben en la época de verano, el director de ANAM en Colón indicó que han llegado a la conclusión que en los primeros meses del año los vientos vienen del norte y cambian su dirección lo que produce que se dienta el olor a azufre con mayor intensidad que en otro período del año donde los vientos van en dirección al mar.
En cuanto al caso de Cemento Panamá S.A., sostuvo que en conversaciones con encargados de la empresa se pudo conocer que la mejor solución para evitar la continuación de la contaminación era la construcción de una nueva planta, debido a que la actual tiene más de 50 años.
Para Carrasco, evidentemente hay un radio de afectación por las partículas en suspensión y que en Panamá no existen normas que se pudieran aplicar y exigir en estos casos, porque lo que hay son parámetros no establecidos y adoptados como normas de la República.
POSICION DE LAS EMPRESAS
La empresa Cemento Panamá S.A., a través de su gerente general Evaristo Sánchez manifestó que las mejoras que realiza la compañía las comparte con la ANAM y no se refieren por el momento al tema.
Prefirió no declarar a Crítica concepto algunos sobre el tema denunciado por los residentes de Nuevo San Juan y comunidades aledañas, sin embargo, se conoció de proyectos para el mejoramiento de los filtros en la planta.
Según se pudo conocer, el nuevo filtro que se instalará tendrá una capacidad para miles de galones de agua donde el vital líquido servirá para retener las partículas de polvo y evitar su salida al ambiente. Este mecanismo garantizará los futuros riesgos de contaminación en el sector.
En tanto, la Refinería Panamá, ubicada en Bahía Las Minas, Cativá ha realizado estudios para determinar si estos olores provienen de sus instalaciones, pero se ha comprobado que no tienen responsabilidad.
Una fuente de la empresa aseguró que al igual que REFPAN, las otras compañías en el área han realizado estudios similares y no detectan que de sus plantas emanan los malos olores que afectan a comunidades vecinas.
Se conoció que Refinería Panamá S.A., en su plan de modernización ha efectuado cuantiosas inversiones para garantizar un medio ambiente sano. |