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Las referencias crediticias en nuestro país se han convertido en uno de los factores importantes de la paralización en la recuperación económica, si destacamos que el consumidor es el factor más importante de nuestra economía doméstica.
Si bien en el pasado se creó una organización para llevar el control de los "mala paga", lo cierto es que en la coyuntura actual, no se pueden seguir aplicando los mismos criterios.
Son muchos los panameños que tienen cultura de pago, pero también es cierto que la coyuntura económica, nos mantiene en un agudo estrés.
Y donde se convierte en un absurdo la premisa de quien intenta refinanciar sus deudas es mal informado, por no tener sus cuentas al día.
Por ejemplo, por atraso en el pago telefónico celular de un contrato, que podría alcanzar los doscientos balboas, a una persona se le niega un préstamos y hasta la compra de una casa, perdiéndose las proporciones de una deuda y un crédito.
En estos registros de mal cliente, se borra la historia de quienes siempre han cuidado su crédito, las circunstancias los obliga a retrasarse pero no existe la voluntad de evadir sus compromisos.
El gobierno debiera analizar a quienes se dedican a esta actividad de controlar las deudas de las personas, porque hasta su publicación podría ser demandada por violación a los derechos individuales. |
