Plato muy saboreado por el griego y en el Medio Oriente, es una pasta o puré hecho a base de garbanzo, aceite de oliva y granos de sésamo que se toma como entremés también en otros lugares.
Este platillo también se puede combinar con arvejas, habas, maíz y debe quedar una pasta lisa para untar en el pan, galletas, etc.
Cuando abra sus latas de garbanzo, no deseche el líquido, guarde el resto que no haya usado y conserve en refrigeración no más de 4 días, ya que después de esos 4 días comienza la fermentación del alimento y ya no puede utilizarlo.
El garbanzo es una leguminosa de gran importancia en el mundo y la primera en la región mediterránea, por ser rico en proteínas de gran calidad. Su consumo reduce el colesterol y posee todas las ventajas de la dieta mediterránea.
El garbanzo es exquisito al paladar, fino, mantecoso y de textura muy suave, es un excelente alimento.
Aparte de proveer proteínas es rico en aminoácidos esenciales como la lisina.
Su alto contenido en fibras ayuda con los problemas del estreñimiento.