Las dos fabricantes de cohetes en EU, Boeing y Lockheed Martin, dejaron de lado sus rivalidades y acordaron fusionarse. Durante años, estas constructoras han peleado para conseguir los contratos del gobierno de Estados Unidos.
En 2003, el Pentágono bloqueó los contratos que tenía con Boeing por US$1. 000 millones, después de que se descubrió que tenía en su poder documentos de Lockheed con los que podía competir en las licitaciones. Con la fusión se suspendería la demanda relacionada a los espionajes.