En Panamá se ha roto el paradigma de que la gente no lee. Esto se comprueba con la gran cantidad de círculos de lectura que se abren y funcionan en universidades, escuelas, empresas y otros lugares. Este, es un paso adelante hacia una nueva cultura que hace crecer, ahora la moda es leer.
Sí, ahora es frecuente que te pregunten, ¿qué lees? O que te digan, ¡recomiéndame un libro! Esas situaciones se dan con gran frecuencia y es que ser lector es algo que entusiasma, anima y provoca emoción. En esa búsqueda de hacer cosas nuevas que eleven el nivel cultural de la gente, hay grupos como PIALI, APELEC; personas como Ricardo Ríos, Sheila de Terán, Enrique Jaramillo, que son incansables pero lo último es que la Comisión de Educación de la Asamblea Nacional ha abierto una convocatoria para concursos entre círculos de lectura y de lectores a nivel nacional, en escuelas oficiales del nivel básico y medio. ¡Enhorabuena por esa iniciativa, aunque hay muchas más!
Para ayudar a esos maestros que agruparán a los escolares en círculos que logren demostrar sus habilidades lectoras, y con la intención de que en esos círculos la lectura deje de ser la tarea escolar para convertirse en un espacio o momento de disfrute, de socialización y de libertad, hago este artículo con algunas ideas que funcionan con los niños de la etapa primaria del nivel básico. Paso a sugerir algunas cosas simples, que pueden ayudar a los docentes de primaria principalmente, para que estos estudiantes que asistirán a los círculos, se deleiten del momento mágico de reunirse en su círculo de amigos de las letras.
Para los círculos de los niños más pequeños, se deben escoger historias sobre situaciones y personajes cotidianos. Se recomiendan las lecturas en voz alta para que los niños las escuchen y se inicien en el leer. El lector, debe convertirse en cada personaje de la narración y ya sea que esta sea en verso o en prosa, debe resaltar la sonoridad de las palabras, con estructuras donde predominen las descripciones y la acción. Por favor no olviden, que a este grupo de pequeños, es importante la repetición de secuencias o patrones sonoros como trabalenguas, retahílas con números, colores, formas y las siempre simpáticas: adivinanzas.