Lionel Richie, uno de los mejores cantantes y compositores estadounidenses de la década del 80, sigue causando furor , por lo menos en Puerto Rico, lugar donde se presentó la noche del jueves.
Su espigado cuerpo sigue meneándose al mismo son que en su época de gloria y su calibre vocal, con sus 55 años, sigue tan potente como o mejor que antes.