Cuatro ocupantes del helicóptero HP-1439 propiedad del empresario Virgilio Athanasiadis, de se salvaron de a milagro, cuando se precipitaron a tierra en la cima del volcán Barú y el aparato quedó a pocos metros de caer a un precipio.
La nave era piloteada por el capitán Guillermo Castillo. Los otros ocupantes eran los hermanos Aníbal y Fernando Serrano, y el argentino Fabio Falcon.