José Mourinho, el polémico técnico del Chelsea y el entrenador aventajado de la "Premier", está cada vez más cerca de completar de nuevo una auténtica gesta futbolística esta temporada, tras arrebatarle hoy el título de campeón de Liga al Arsenal.
El pasado 27 de febrero, el club de Londres se imponía por 3-2 al Liverpool de Rafael Benítez en la Copa de la Liga, aniquilando los sueños de los "Reds" y embolsándose el primer premio de la campaña. Un gol en propia meta del capitán de Anfield, Steven Gerrard y dos acciones del yugoslavo Mateja Kezman y del marfileño Didier Drogba anticipaban el resto. Pero la "Carling" fue sólo un aviso: el prólogo de lo que se avecinaba, que era mucho.
El técnico del Arsenal, el veterano francés Arsene Wenger, hombre sensato y comedido, también se ha quitado el sombrero ante la revolución portuguesa y llegó a comentar que el Chelsea se merecía ser campeón. Y así ha sido. Ya van dos títulos esta campaña y la ambición de José Mourinho no conoce límites.