Esperamos que este escrito sirva de ayuda para aquellas personas con puestos de liderazgos dentro de las organizaciones públicas o privadas.
Alguien dijo alguna vez que es duro ser jefe. Sí, en efecto, no se equivocó. Tener a su cargo un grupo miscelanio de mentes y actitudes diferentes es para volverse loco, pero hay fórmulas y maneras de lograr un efecto positivo en el equipo.
Tener a sus trabajadores del lado de uno no se alcanza con bonos ni beneficios extras. Muchas veces esto no logra impulsarlos de manera armónica. Hay jefes que esperan que todo el personal se "enganche" en los proyectos apasionantes, lo cual sucede sólo en raras ocasiones, pero pontro descubrirán que muchas personas no son líderes ni desean serlo; muchas prefieren recibir indicaciones y seguir un plan de trabajo, así de simple trabaja la mayoría de los panameños.
Aprender a asumir tu cargo de jefe en tu propia empresa no significa actuar con mano dura ni convertirse en un dictador de la noche a la mañana. Muy por el contrario, para ser un buen jefe debes conocer a fondo las necesidades de tu empresa y aprender a delegar tareas a las personas apropiadas. Si te cuesta trabajo asumir tu nuevo cargo considera estos puntos que pueden ayudarte a ser un buen jefe y dirigir con éxito tu nueva empresa.
- Contrata al personal apropiado para las tareas que deberán desempeñar en tu empresa.
- Sé preciso. Ejercita todo el tiempo tus habilidades para comunicarte con tus empleados y asegúrate de que comprendan tus directivas.
- Nunca te rebajes a discutir con nadie. Eso te tira al piso y pierdes liderazgo.
- No te contradigas en lo que hagas y digas.
- Respeta a tus colaboradores como si se tratara de tí mismo.
- Y lo más importante, cree en las oportunidades. No te conviertas en una máquina de "botar", sólo porque alguien expuso un punto de vista diferente al tuyo. Se me pasaba algo más: ¡NO GRITES...!
