Unas 200 familias precaristas de la comunidad de Nueva Esperanza en Loma Cová, áreas revertidas de Arraiján, claman a las autoridades del Ministerio de Vivienda, la titulación de los terrenos que habitan desde hace más de una década.
Según Pedro Cortés, vocero de los quejosos si bien es cierto invadieron las tierras por la necesidad de una respuesta habitacional el MIVI procedió a reordenar el área, sin embargo hasta la fecha están a la espera de la titulación.
En la administración anterior las autoridades del MIVI prometieron realizar los trabajos de la mensura desalojaron a todo aquel que estaba mal ubicado, incluso reordenaron el área han transcurrido el tiempo y aún esperan de una solución definitiva a la problemática.