El secretario de Defensa de EEUU, Donald Rumsfeld, contra las cuerdas tras recibir las críticas de varios generales en la reserva, afirmó que no se ha planteado dimitir.
Rumsfeld se reunió con varios analistas militares, a los que explicó la situación en Irak, tras lo cual celebró una rueda de prensa en la que se vio acribillado a preguntas sobre sus planes y su futuro.
El secretario de Defensa dejó claro que no se plantea dimitir y atribuyó el descontento expresado por esos generales a las reformas que él y su equipo han introducido en las Fuerzas Armadas de EEUU.
En cualquier caso, apuntó, su cese como responsable del Pentágono debe corresponder al presidente, George W. Bush.
Bush "sabe, como lo sé yo, que no hay hombres indispensables, y sabe que yo estoy a su servicio en tanto él lo quiera", afirmó Rumsfeld.
Desde el pasado viernes, el presidente ha defendido públicamente en varias ocasiones a su secretario de Defensa.