Desde la década de 1960 y años subsiguientes, un humilde hijo de Bocas del Toro, llamado Humberto Chiú Rocha, él solito; formó amplia conciencia en las Universidades de Panamá y por toda la ciudad capital en lo referente a la realidad de Kosovo. Chiú era estudiante de Diplomacia y Relaciones Internacionales. Su sostén lo derivaba de mantener correspondencia con todos los países del mundo, los cuales le remitían un gran volumen de libros, revistas y materiales culturales únicos que él repartía persona a persona por las calles, los comercios, los tribunales o enviándolos al interior incluso a Colombia y Costa Rica, y por doquier hablándole a la gente, formando conciencia actualizada de política, literatura y otros temas. Chiú fue un personaje muy popular de los cafetines santaneros.
La vida de Humberto Chiú Rocha cobra ahora relevancia global, el lunes 26 de marzo de 2007 S.E. Martí Ahtisaari, finlandés enviado especial de las Naciones Unidas, recomendó en un detallado informe de 26 fojas presentado al Consejo de Seguridad; otorgar la independencia a Kosovo, y que tal transición "se realice bajo supervisión civil y militar de la comunidad internacional." (DPA, Bruselas).
Cuarenta años antes de esta actualidad, nuestro compatriota Humberto Chiú Rocha mantenía correspondencia con lo que él gustosamente llamaba Squiperia, y habían venido a coordinar con él Memet Sheshu y Ramiz Alia en calidad de diplomáticos despachados desde Tirana, por el presidente Enver Hoxa, Humberto Chiú Rocha invirtió toda la energía de su vida en formar el Círculo de Amistad Panamá-Albania y en detallar día a día la necesidad de la independencia de Kosovo. Gracias a él muchos entendemos el asunto de Kosovo, nación mártir víctima de masacres étnicas, despojos y manipulación de la historia.
¿Será acaso que S.E. Marti Ahtisaari esté equivocado? ¿O será acaso que S.E. Marti Ahtisaari actúa como alumno ultratúmbico de las benevolentes convicciones de ese panameño albanés por siempre llamado Humberto Chiú Rocha?
Sea esta prosa, nuestro homenaje a Kosovo y a Humberto Chiú Rocha, en cuyos apellidos resuena como arreboles de mar en caracoles la sangre universal de nuestros patriotas bocatoreños.