Jaime Lezcano, de 69 años, murió a causa de miles de picaduras que le propinaron abejas africanizadas, mientras realizaba trabajos de agrimensura dentro de una finca, ubicada en el corregimiento de San Andrés de Bugaba.
Otras dos personas que lo apoyaban en la labor, lograron huir del enjambre. Esto ocurrió el domingo al mediodía.