"Honrarás a tu padre y a tu madre" es lo que dice el Cuarto Mandamiento de la Ley de Dios.
Ello implica no mirar mal a los progenitores ni mucho menos contestarle ni levantarle la voz y pecado más grande es levantar la mano contra los padres.
Sin embargo, parece que algunos hijos panameños nunca han escuchado esos mandamientos, los que se enseñan no necesariamente en una Iglesia.
Tal es el caso de un hombre de 38 años, D.R.C., quien fue llevado a la Sala de Urgencias del Hospital Santo Tomás en una ambulancia de DENADE Pre Hospitalaria. Este hombre tenía una herida con arma de fuego en el área del abdomen.
Según trascendió, el herido procedía de un lugar frente a Acero Panamá, en la vía Tocumen.
En un suceso confuso, pero que se investiga, aparentemente D.R.C. forcejeaba con su padre para arrebatarle una escopeta.
¿Dónde estaba el padre con el arma? ¿Porqué el padre la tenía? ¿Porqué forcejeaban? ¿Para qué quería el hijo el arma? ¿Qué sucedía? Eso es lo que le toca a las autoridades investigar para que se apliquen las sanciones que se disponen en las leyes nacionales.
Lo cierto de este caso es que el hijo quedó con un impacto a un lado del abdomen, ya que supuestamente en el forcejeo la escopeta cayó al piso y se hizo la detonación, según informaciones extraoficiales.
El hombre quedó con los intestinos afuera según se informó extraoficialmente, pero los galenos se los acomodaron.
El sujeto quedó hospitalizado luego de los auxilios prestados en el Hospital Santo Tomás, donde llegó a las 2: 00 de la madrugada de ayer, domingo.
No se dieron más detalles del suceso. Se espera que hoy lunes se formalicen algunas investigaciones.