Su nombre prefiere mantenerlo en anonimato, no quiere que piensen que quiere congrasearse. Pero en esta oportunidad no se quiso quedar callado, quiere definir el verdadero valor de una mujer, y cómo las miran y admiran los hombres.
"Una mujer va más allá de una figura hermosa, un buen vestuario, maquillaje y cabello arreglado. La mujer significa más, es aquel ser que se propone algo y lucha sin descansar para verlo cumplido.
No son como antes, ya no tienen límites. Quiere un empleo y luchan por él; es más, ya no necesitan de los hombres para una casa, un carro o algo de valor. Son vanguardista, independientes, inteligentes, los primeros puestos en un salón de clase o en la universidad. Tienen grandes posiciones en su trabajo.
Poseen coraje, mucho coraje y determinación, saben lo que les conviene y lo que no. Son trabajadoras y capaces de hacer varias cosas al mismo tiempo. No les importa levantarse a las 5:00 de la mañana, ir al trabajo, luego a la universidad y dejan algún tiempo para parrandear.
Son alegres, en las discotecas se costean sus propios tragos, ni siquiera les interesa un parejo hermoso, prefieren uno que sepa bailar y sea cortés.
Pero definitivamente, a las que más admiro son aquellas que se dedican a sus hijos, esas que saben como mezclar el trabajo, la familia, los quehaceres del hogar y todavía le queda tiempo para complacer a sus maridos, quienes sin piedad sólo exigen más. Por si fuera poco, anda de un lado al otro con tremendos tacones sólo por elegancia y para lucir hermosas, ¿cómo si fuera necesario?
Admiro a las sencillas, a las sensibles, a las pura de corazón, a las que no le temen al fracaso, y no les interesa los que digan los demás. Las que son madre y amigas, y lloran en silencio por sus hijos. A las que se trasnochan por complacer a sus maridos. Qué les puedo decir.. amo a las mujeres simplemente por ser un ser perfecto, pero más que nada por ser fuertes.