El ex militar estadounidense Timothy McVeigh, condenado a muerte por hacer estallar un carro bomba frente a un edificio federal en Oklahoma City, en Estados Unidos, intentó apelar la sentencia ante la Suprema Corte, pero esta le negó el recurso un 8 de marzo de 1999. McVeigh fue ejecutado el 11 de junio de 2001 por con el método de inyección letal.