En los últimos años, los sistemas que científicamente determinan la historia de un producto de origen animal o vegetal han adquirido importancia para los países desarrollados que negocian tratados de libre comercio. Es parte del incremento de exigencias de los consumidores respecto a la seguridad de los alimentos y sus riesgos sanitarios.
Al respecto, el Dr. Filiberto Frago, director nacional de Salud Animal del Ministerio de Desarrollo Agropecuario, ha ejecutado, desde el 2005, un plan piloto de trazabilidad en Darién, específicamente en La Palma, Setegentí, Santa Fe y Metetí, y ha cubierto a 338 fincas e identificado a más de 30 mil 800 animales.
De acuerdo con la Dirección Nacional de Salud Animal del MIDA, en Panamá este tema ha sido abordado con responsabilidad, trabajándose la sistematización de los procesos involucrados en la producción, el transporte y la comercialización tanto de bovinos de carne como de leche, aves (carne y huevos) y camarones de cultivo. Hay que agregar los productos agrícolas claves para la exportación como la sandía, el melón, la piña y el café gourmet.
El plan del MIDA contempló la capacitación de casi mil 600 productores pecuarios con más de 300 reuniones y talleres a nivel nacional. De igual forma, el primer foro internacional sobre trazabilidad bovina se realizó en el cordón fronterizo limítrofe con Costa Rica en Chiriquí, con 32 fincas y ocho mil animales; y Bocas del Toro, con 96 fincas y más de tres mil 800 animales identificados.
