En un caso para "Ripley", las empresas mexicanas que operan los corredores Norte y Sur alegan que no han recuperado su inversión; y para colmo, PYCSA Panamá sostiene que ha perdido $12 millones. Ante el escandaloso escenario el Gobierno anunció la renegociación de esos contratos.
El Ministerio de Economía y Finanzas reveló los resultados de las auditorías realizadas a esas concesiones, donde los mexicanos lograron colar tasas de descuento de hasta el 12.5% de las utilidades en los años de concesión. De esta forma, de cada dólar real de utilidad generada en el 2009 por las concesionarias, estas solo contabilizan como amortización de la inversión entre 16 y 18 centavos de dólar.
Por ejemplo, en el caso de PYCSA con la fórmula que utilizan de una inversión de $307 millones, en el año 2034 apenas habrían recuperado la cifra irrisoria de $55 millones.
En el caso de ICA que además de cobrar $2.50 de peaje pudo vender 29.5 hectáreas del antiguo aeropuerto de Paitilla (hoy Multi Plaza) y rellenar 35 hectáreas en Punta Pacífica, se alega que apenas ha recuperado $180 millones: $136 millones por la venta de las tierras y $44 millones por peajes. El Corredor Sur costó $222 millones y la utilidad acordada era de $84 millones, para un total de $306 millones.
Con PYCSA el panorama es peor. Tras 12 años de concesión la compañía ha recibido $197 millones en peajes, pero solo para pagar los intereses de sus deudas y la compañía refleja pérdidas acumuladas por $12 millones.
Para colmo de males, no nos podemos sacar el clavo. Los proyectos fueron aprobados por la Asamblea Nacional y la nacionalización de los corredores le costaría al Estado más de $1,000 millones.