S E C C I O N E S

EPASA EN LINEA

PANAMA AMERICA

DIAaDIA EN LINEA

REVISTA SIETE!


inicio

portada

al cierre

nacional

política

opinión

el pueblo habla

provincias

nuestra tierra

sport

el mundo

viva

vida nueva

sucesos

 

CRITICA
 
REFLEXIONES
  OPINIÓN


Las damas del béisbol

Yadira Roquebert | Colaboradora

"Niñas... niñas" diría don Eric Espino cada vez que observa la presencia de las damas en los estadios de béisbol. Y es que las hay de todas las edades. Muy jóvenes, de edad media, avanzada, en fin, y no sólo embellecen el panorama, sino que juegan un rol determinante en los partidos.

Con el inicio del torneo de béisbol mayor, nuevamente regresé a presenciar estos partidos, siempre como respaldo a mi hijo, quien ama este deporte y lo practica desde los seis años. El tema es que me sorprendí al ver como las damas que asisten a los estadios se toman el partido, desde el inicio hasta el final.

Vemos como unas "brujitas" realizan un espectáculo propio de la idiosincrasia de una región de Azuero; otras apoyan como cantalantes en las murgas o a los arrastra latas, como también le llaman; se escuchan cantos y expresiones que animan a los equipos y hasta expresan su disconformidad cuando un jugador comete un error o realiza una jugada que no le favorece, y más aún, cuando un árbitro, a su juicio, toma una mala decisión.

En otras ocasiones, las vemos dando indicaciones al lanzador o al receptor, a tal punto de que parecieran todas unas expertas. Términos como: "busca la zona" o "pícher, llámalo". También se escuchan cantos como "pícher nuevo, palo con él" o "ese pícher está bolero", "ponche de abanico para que se quede calladito" y al final del partido, si su equipo ha ganado se les escucha con cantos como " ring, ring, ring... contesten el teléfono que (nombre del equipo) ya ganó", huy! mucha imaginación y creatividad.

Escuchar estas expresiones, con respeto y cordura, me satisface y me hace sentir que las damas tenemos libertad de expresión; nos atrevemos a opinar y a actuar, sin que haya alguien que nos limite. Que caminamos al lado del hombre, no detrás de él. Que ese soporte que somos en el hogar, también lo somos fuera de él, pues con nuestra presencia en los estadios animamos a los hijos, esposos, novios o amigos que en esta época se ponen una camiseta para representar a su provincia.

Este es un ejemplo de que la mujer dejó de ser sólo la administradora del hogar que implica atender al marido y criar a los hijos, pues encontró el camino de los estudios que la lleva a profesionalizarse, a realizar otras actividades, a compartir nuevas amistades y con ello nuevos roles.

Yo soy mujer, y sobre todo una dama, y me siento orgullosa de ello. Es evidente la espectacular escalada que la mujer está consiguiendo, a base de esfuerzo. Ahora estudiamos, nos formamos, trabajamos y compartimos con nuestra familia, y nos esforzamos cada día para que se nos reconozca como unas verdaderas administradoras y planificadoras, tanto en nuestros hogares como fuera de ellos. Es un trabajo del día a día para conseguir una buena situación económica, social y personal.




OTROS TITULARES

Hito del cine

Sin embargo, lo quiero todo sin esforzarme

5 cualidades de un empresario exitoso

Las damas del béisbol

Buzón de los lectores

¿Cuánto vale nuestra familia?

Bobos o qué

 


 

  





linea
linea gris
 

   copyright © 1995-2009, CRITICA EN LINEA
todos los derechos reservados