"Viva Chary", gritaban cientos de familiares y amigos del asesinado Alexander Justiniani, cuando el féretro donde reposaban sus restos salía del templo del Parque del Recuerdo.
Entre lágrimas y tristeza, además con la notable ausencia de David Viteri, compadre de Justiniani, a la 1: 50 p.m. de ayer, se iniciaron la honras fúnebres en un ambiente tenso al principio, pero conforme avanzaba la misa, la tranquilidad comenzaba a reinar.
El cadáver de Alexander Justiniani, lucía un saco de color gris y una camisa negra, a su lado había una caja de dominó, ya que era aficionado a este juego de mesa; al punto que el sábado, cuando fue asesinado. jugaba una partida en un sector de Veranillo.
Al finalizar la solemne misa, unos de los hermanos exclamó ante el público, que "la violencia sólo puede ser detenida por Jesucristo".