Un contundente Manchester United clasificó ayer para cuartos de final de la Copa inglesa tras despedazar al Arsenal de Cesc Fábregas, minado a diez hombres con la expulsión del marfileño Emmanuel Eboue, al que castigó con un rotundo 4-0.
Tras el batacazo que sufrió el conjunto que dirige el francés Arsene Wenger en la Copa de la Liga -ante el Tottenham Hotspur de Juande Ramos, por 5-1-, de nuevo les tocó sufrir a los "Cañoneros", que se despidieron amargamente de la otra Copa.