Según especialistas en asuntos económicos, como Armando Díaz, las pasadas inundaciones no sólo causaron un gran daño a sectores importantes de la economía bocatoreñaL el golpe ha sido más complejo de lo que pareciera.
Dijo que en la provincia es notable un retraso de por lo menos quince años, debido a los múltiples despidos que se han registrado en la actividad bananera, que representa la mayor fuente de empleo en Changuinola.
Añadió que la red vial se ha visto seriamente afectada y lo peor del caso, que muchas actividades comerciales no podrán seguir, a menos que se realicen gestiones que permitan regenerarse, acorde a las exigencias del mercado.
Esos puntos son dentro del entorno económico, pero dentro del ambiental la nota no deja de ser preocupante, ya que muchos indígenas provenientes de las zonas comarcales, al carecer de fuentes de trabajos puntuales, suplirán sus necesidades energéticas, domiciliarias y alimenticias mediante la tala de árboles y la cacería
El entrevistado manifestó que los despidos ascienden a más de 2,000 y dercada trabajador, por lo menos dependen tres hijos.
Señaló que los bocatoreños están exigiendo al gobierno que deben dar paliativos como: bonos económicos para las familias más afectadas.
Sobre el tema se conversó con el representante de la comunidad de Guabito, Antonio Weddemburg, quien se siente optimista, debido a que considera que el trabajo se está haciendo y equipando la red vial necesaria para que se dé todo el movimiento comercial, al igual que otras infraestructuras prioritarias.