Un llamado a los empresarios a dejar de ser "tacaños" con los que menos tienen, hizo ayer Alberto Vallarino, señalando que el salario mínimo en Panamá no sólo da para más a corto plazo, sino que -con el rendimiento económico de los últimos dos años y lo que se perfila en inversión en el quinquenio próximo- podrían concederse aún mayores aumentos.
Vallarino, en declaraciones exclusivas para Crítica, argumentó que la comisión de salario mínimo bien puede acordar un ajuste de entre el 10% y el 12% al actual salario mínimo de 264 balboas.
A diferencia de la mayoría de los dirigentes empresariales del país, el Presidente de Banistmo considera que la medida no sólo sería beneficiosa para la economía del país, sino que representa un gesto de justicia social hacia la ciudadanía; afectada por los aumentos del combustible, la energía eléctrica y la canasta básica.
"Ningún país se desarrolla con salarios bajos", destacó Vallarino. "El salario mínimo -cuando se aumenta- genera mayor consumo, porque la gente de bajos ingresos se gasta todo su salario; pero al ganar más, se genera un efecto multiplicador".
Agregó que "no se puede seguir posponiendo el tema, ni se puede ser tacaño con los de menores ingresos. Las cifras de crecimiento de los últimos dos años, y las perspectivas de los próximos cinco años, con la ampliación del Canal de Panamá, el centro multimodal y otros proyectos, no hay forma de oponerse (al aumento de salario mínimo)".
Para el banquero, los asalariados son los mayormente golpeados con los recientes aumentos del costo de la vida, ya que mientras la empresa privada puede ajustar el costo de sus productos y servicios, los primeros no.
De igual forma, Vallarino urgió a que se nivele el salario mínimo del sector público al del privado. "Mejores salarios ayudan a mejorar el nivel de vida de la sociedad", sentenció.