El presidente de México Vicente Fox anunció el inicio de una guerra contra el narcotráfico y el crimen organizado, a raíz de la ola de asesinatos en varias localidades y prisiones del país.
Fox también prometió reformar las prisiones mexicanas, desde donde los jefes del narcotráfico supuestamente ordenan asesinatos y dirigen operaciones ilícitas.
"La madre de todas las batallas estamos dando en contra del crimen organizado, el narcotráfico y ahora, en este caso, en los penales federales", declaró el mandatario a la televisión mexicana.
Fox advirtió que su gobierno "no tendrá más límite que el que la Constitución le marca" para combatir el crimen.
Las autoridades mexicanas colocaron todas sus cárceles de máxima seguridad en estado de alerta debido a la renovada violencia de los narcotraficantes.
Como consecuencia, quedaron suspendidas las visitas de los familiares de prisioneros en esas cárceles.
Según las autoridades, con las seis muertes en Matamoros la cifra de homicidios relacionados con la guerra entre carteles de la droga llegó a 28 en lo que va del año.