La ronda regular de Campeonato Nacional de Béisbol Juvenil ha dejado en claro qué debe hacer cada Liga Provincial para poder crecer deportivamente en los próximo torneos.
Primero, hay que poner a jugar a los jóvenes la mayor cantidad posible para que puedan desarrollar su cualidades y que cuando llegue el campeonato nacional estén listos para representar a sus provincias.
Esto ha dejado claro que llenarse de jugadores de otras provincias para completar un roster es engañarse y no querer enfrentar la realidad, que la verdadera labor de un dirigente es ser responsable en la elaboración de ligas para que sus talentos tengan lo mínimo para continuar con su desarrollo.
Otro aspecto en el que no estoy de acuerdo es que alguno de ellos dicen que el torneo nacional es demasiado corto y los jugadores no se adaptan.
Me quedo pensando y llego a la conclusión que donde se deberían tener la mayor cantidad de juegos son en los torneos distritales, las ligas de corregimiento y los provinciales, ya que aquí es donde el jugador tiene la verdadera evolución de su potencial y talento, para que en el campeonato nacional brinden todas su cualidades en la competencia.
EL BEISBOL NO MUERE...
Me alegra ver cómo jóvenes panameños siguen emergiendo en cada campeonato juvenil y otras ya conocidas que mantienen su nivel.
Jugadores como José Mayorga, Pedro Miranda, Bryan Quiroz, Luis Sempris, Max Ayarza, Juan Madrigales, Mario Sanjur y el mismo Rodrigo Vigil han hecho que este torneo tenga un buen nivel.
Pero esto no es casualidad, porque como dije antes, esto se debe al trabajo y la dedicación de aquellos dirigentes que saben hacer su trabajo, donde su prioridad es que sus peloteros tengan un buen desempeño en la competencia.