Marcos Quintero, de 30 años, celebraba la madrugada de ayer una fiesta en su casa en la barriada Santa Mónica, de Las Cumbres. Otras cuatro personas participaban en la pachanga, pero de pronto se formó una discusión, luego alguien apagó la luz y se desató la tragedia: Marcos fue asesinado de 20 puñaladas.
Un amigo cercano de Marcos y quien había llevado a otros tres sujetos a la fiesta, fue detenido tras regresar a la escena del crimen.