Cuando se habla del cuidado de la piel en verano, lo primero que deben pensar es en un bloqueador, eso sí, debes tener claro que para cada tipo de piel hay uno especial.
Piel grasosa: Debes utilizar un bloqueador en gel.
Piel seca: Debes utilizar un bloqueador en crema.
Piel normal: Puedes usar cualquiera de los dos mencionados anteriormente o uno en "spray".
El factor del bloqueador puede ser cualquiera, pero como mínimo debe ser de 30 SPF. Sin embargo, no tiene nada que ver el número de SPF; algunas personas piensan que porque un bloqueador tiene 50 SPF es mejor que uno de 30 SPF, la verdad es que no es así.
La única diferencia entre un factor y otro es que el primero puede ser aplicado cada 5 horas y el segundo cada 3 horas; pero recuerda que si transpiras demasiado, debes echarte el protector solar con más frecuencia.
Además, debes aplicar tu bloqueador en las zonas que más expuestas están al sol, como la cara, el cuello, el pecho y los brazos.
Por otro lado, debes exfoliar tu cuerpo cada vez que te bañes, y el rostro mínimo 2 veces por mes para así deshacerte de todas las impurezas que se acumulan en la piel.
Lo recomendable este verano es humectar e hidratar nuestra piel, ya que en esta época se tiende a sudar más y esto hace que la piel pierda hidratación.
Además, debes usar alguna crema hidratante o humectante, dependiendo del tipo de piel que tengas y no olvides que debes beber mucha agua, mínimo 2 litros diarios. De esta forma, no sólo hidratamos nuestra piel por fuera, sino por dentro; te aseguro que lucirás una piel radiante, fresca y hermosa.
