Cruzaba la calle en estado de ebriedad y la esposa de un diplomático lo atropelló.
Aparentemente el hombre se le aventó al carro y por suerte sólo recibió un golpe en el hombro.
El afectado fue llevado a la sala de Urgencias del Hospital Santo Tomás, en donde, hasta el cierre de esta edición, aún permanecía recluido.
Fuentes extraoficiales informaron que al preguntársele la edad, el hombre se la cambiaba constantemente e incluso llegó a decir que tenía diez años.
El personal que atendió al afectado también le preguntó si sabía donde estaba y el mismo contestó que "en el Decameron".
Una fuente médica reveló que el atropellado tenía un golpe viejo en la cabeza que tal vez estaba afectando su lucidez, además del licor que había consumido.
En representación de la esposa del diplomático, personal de una embajada se mantenía pendiente de la evolución del hombre, a pesar de que se presume que la fémina no tuvo la culpa del accidente.
El atropello se dio a las 8: 30 de la mañana del miércoles, en la avenida Balboa, frente al antiguo restaurante "La Cascada".