Con un llamado a terminar con las profundas diferencias políticas que han dividido a los puertorriqueños por décadas, tras serias impugnaciones a la pasada elección, Aníbal Acevedo Vilá juró como el octavo gobernador electo de la isla caribeña.
Acevedo Vilá, un abogado de 42 años que ha sido durante los pasados cuatro años el delegado con voz pero sin voto en el Congreso estadounidense, sustituyó en el cargo a Sila María Calderón, quien decidió no postularse a un segundo mandato. El ahora gobernador venció a Pedro Roselló, defensór de la unión estatal a EE.UU.