Una de las peores crisis que sigue atravesando la comunidad santiagueña, se sustenta en los métodos anticuados para la recolección de la basura el cual sigue siendo un dolor de cabeza para las autoridades municipales.
Desde 1982, es decir, más de 27 años, desde ese entonces vive el problema de la recolección de los desechos sólidos, situación que aún está latente.
A mediados del año 2007, llega a Santiago la empresa recolectora "Santiago Waste Management", para ser contratada para recoger los desechos sólidos y darle el tratamiento final a la basura pero, fracasa ante la decisión de muchas personas que fueron aupados por líderes para que no pagaran este servicio, creando serios conflictos entre el municipio y la mencionada empresa.
Esto causó la quiebra de la empresa recolectora, la que, finalmente se retiró, por las deudas que le crearon.
La pasada administración alcaldicia dejó en crisis la basura en casi toda la ciudad de Santiago, por alta morosidad de quienes, de manera irresponsable, recibieron el servicio, se beneficiaron y jamás pagaron.
El asunto es complejo, para las autoridades que han dado respuestas que no satisfacen a los usuarios, puesto que hay demasiada basura en las entradas de carreteras y en las orillas de quebradas, en las calles, producto de la irresponsabilidad de quienes aún no comparten la idea de pagar el servicio.
Pero este asunto, según el alcalde Gonzalo Adames, debió resolverse en los pasados 10 días, pero se han tenido algunos inconvenientes que le fueron heredados del ex alcalde Rubén Patiño y, por ello, aún las empresas licitantes no han podido remediar la recolección de la basura.
Para el ambientalista Herminio Rodríguez, la construcción de un nuevo relleno sanitario en la comunidad de El Espino, vía distrito de San Francisco, tampoco es la solución al problema de la disposición final de la basura, puesto que el manejo debe hacerse de una forma científica para los desechos sólidos.