En la actualidad, muchas personas coinciden en la tesis de que después del segundo año de unión o matrimonio, ya nada es igual, todo ese color rosa de la adaptación y primeros días de pareja cambia. �Ojo!, eso depende de qué tanto se quiere la pareja o de cuánto estén dispuestos a conservar la familia.
Ahora, �los días pasan sin que haya estímulos ni ilusión? �Ya está todo dicho y hecho, y no pasa nada nuevo en tu relación? Si tienes estos síntomas, el diagnóstico es: aburrimiento. Pero recuerda que amarse y aburrirse son dos palabras que no van juntas.
Aquí van algunos consejos que pueden serles útiles para evitar que la rutina desgaste su relación.
- La relación se daña si uno de los dos busca afuera un amante por tener novedad y estímulos que no encuentra dentro de su relación. Sin embargo, con una comunicación auténtica, pueden alejar la rutina y reponer su entusiasmo.
- Revisar actitudes: No superarán el tedio si siguen una serie de "recetas para divertirse", sino que tarde o temprano las dejarán de lado.
Reserven un tiempo para cada uno, esto no los separará, sino que los unirá más y renovará el interés del uno por el otro.