Después de un hecho fatal siempre hay una tragedia familiar, que tarda mucho en sanar.
Ernestina Quirós Ramos, de 50 años, era una mujer trabajadora, madre de dos hijos, un varón de 21 años, y una mujer de 18 años.
Como era costumbre, se levantaba muy temprano en la mañana para dirigirse hasta su trabajo como doméstica en el corregimiento de Tocumen.
Ayer sábado no fue la excepción a la regla, pero lamentablemente, el destino le deparaba una sorpresa mortal, cuando se disponía a cruzar una calle, un panel de una empresa que brinda servicios en el Aeropuerto Internacional de Tocumen la arrolló, después de que previamente también impactara a la niña Cristel Matta.
Bolívar Gustavo Gaitán, hijo de la occisa, informó que en esos momentos venía de su trabajo en el autobús, cuando pudo percatarse del accidente.
Sin embargo, nunca pensó que era su madre, pues desde su asiento sólo logró divisar el cadáver de la menor.
Antes de llegar a su destino recibe una llamada para darle la mala noticia que su madre había fallecido en el accidente que minutos antes acababa de presenciar.