Una inspección ocular a la Unidad Sensitiva de la Policía Técnica Judicial, ubicada en Clayton, donde laboraba el finado Franklin Brewster, fue realizada ayer por el fiscal primero Superior, James Bernard.
En la diligencia participaron además los abogados Rolando Rodríguez y Alexander Sánchez, apoderados legales de Gioconda Béliz y Kenneth Brown, ex funcionarios de la Unidad Sensitiva de la PTJ.
Francis Irving, ex empleado, enfrenta una situación judicial distinta a la detención preventiva, pues goza de una medida cautelar.
Estos ex funcionarios tienen varios meses de estar detenidos, por su presunta vinculación al deceso de Brewster, ocurrido el 19 de julio de 2006, pero sus abogados rechazan esas acusaciones.
Por su parte, Gustavo Barragán señaló que esta es una diligencia que se realiza en conjunto con la Fiscalía Primera Superior.
"Es una diligencia de reconstrucción de los hechos, que es la muerte del compañero Brewster, y pretende tomar toda la información relacionada al día en que éste muere", indicó Barragán. Personal que laboraba en la Unidad Sensitiva, al momento del deceso de su jefe, ha sido reubicado en otras secciones para facilitar las investigaciones correspondientes.