"Quien a hierro mata, a hierro muere". Ese refrán se aplica a Eduardo Frutos Batista, un hombre que tenía sobre sus hombros seis cargos por asesinato, que fue acribillado antenoche de ocho tiros, que le propinaron sujetos desde un auto entre calle 3ra. y 4ta. de Río Abajo. Los homicidas para rematarlo le pasaron el vehículo sobre el cuerpo.
Frutos Batista, de 36 años, estuvo detenido por el homicidio del ingeniero Scott John Barton, cuya empresa inició la construcción del Hospital San Miguel Arcángel.
El hombre, que el 29 de este mes cumpliría 37 años, también fue procesado por los crímenes de los colombianos Nilo Rubén Miles Malo y Mario Alfonso Escobar Vélez, perpetrados el 20 de agosto del año 2001 en medio de un tumbe de drogas.