El proceso de la seducción era exclusivo de los hombres, pero hoy la seducción se ha generalizado y de hecho cada persona tiene su propio estilo, pero es innegable que hay formas generalizadas que casi siempre funcionan.
La vestimenta, los accesorios y los adornos e incluso el maquillaje son armas importantes.
La mirada, es por mayoría, el método favorito de las mujeres, por lo sutil, elegante y expresa más que mil palabras. Mirar de reojo o fijamente, según lo requiera el momento, son siempre señales claras de un interés en el otro.
El proceso de la seducción no es sólo para lucirte tú misma y que vean todos tus atributos, sino que también es necesario que quien sea tu prospecto de conquista se sienta importante.