La cifra escalofriante del robo en Belfast trae a la memoria del Reino Unido el histórico robo de un tren en 1963, cuando una banda asaltó un convoy postal procedente de Glasgow con destino a Londres, del que escapó con un botín de 2,6 millones de libras esterlinas (alrededor de 5 millones de dólares) en dinero en metálico.
El "cerebro" de este atraco, Ronald Biggs, fue condenado a 30 años de reclusión en 1964 pero se fugó al cabo de 15 meses.