Un rostro radiantes es reflejo de buenos cuidados. Las mascarillas son un arma infalible para detener la llegada prematura de las insoportables arrugas.
HIDRATANTE
Esta mascarilla es apropiada para cutis secos y sensibles. Bate tres cucharadas de yogurt, mézclalo con una yema de huevo y unas gotas de jugo de limón hasta obtener una crema. Aplícala en tu rostro y espera que actúe durante 20 minutos. Límpiala con bastante agua.
PURIFICANTE
Ideal para las adolescentes con granos y puntos negros. Machaca medio pepino con una cucharada de perejil y cebollina. Mezcla la pasta con una tacita de requesón, a ser posible desnatado. Aplícatelo y deja actuar 20 minutos.
ADIOS BARRITOS
Esta mascarilla es especialmente beneficiosa para pieles con barros o espinillas. Prepara una mezcla con la pulpa de una manzana, puedes hacerlo manualmente o con el procesador de alimentos o la licuadora. Déjalo en tu rostro durante 20 minutos y luego enjuaga con agua.
CUTIS SECO
Mezcla la yema de un huevo con una cucharada de aceite de oliva. Aplícalo en tu rostro unos 30 minutos, con excepción del área de los ojos y los labios. Finalmente enjuágalo con agua.
