Sepultado, así fue ubicado por las unidades policiales un revólver calibre 38 con cuatro municiones, ayer sábado, dentro de un lote baldío en El Mirador de Torrijos Carter, distrito de San Miguelito.
Producto de la acción policial se detuvo un hombre de 20 años, quien reside cerca del lugar del hallazgo.
El arma fue verificada y se comprobó que se encontraba reportada en la Dirección de Investigación Judicial como hurtada a un guardia de seguridad a finales del mes de noviembre.
La modalidad de enterrar las armas pareciera ser la última moda entre la delincuencia organizada.