El exceso de lluvias que se registró este año en Herrera provocó una disminución de más del 10% en la producción de leche grado C que se utiliza en el sector industrial; sin embargo, los productores de esta zona esperan que esta situación los beneficie en la temporada seca.
El ingeniero Sebastián Peralta, presidente de la Asociación Nacional de Ganaderos (capítulo de Herrera), explicó que en los últimos meses las lluvias han sido bastante intensas y los animales no consumieron la suficiente cantidad de hierba y la que lograron comer tenía un porcentaje de agua muy alto.
Detalló que ante esta situación el ganado tiene que consumir más fibra y tiende a caminar más porque le pican la patas, manifestando que estos factores influyeron directamente en la producción de leche.
Señaló que aunque en un principio esto les preocupó, les motiva saber que de igual manera la producción de leche que comenzaba a decaer en enero se extenderá hasta febrero tomando en cuenta que el nivel freático de la tierra estará alto por más tiempo gracias a las lluvias que han caído.
Aclaró que esta disminución registrada en la provincia con la leche grado C, no tiene nada que ver con la producción de leche grado A, que es la que se comercializa pasteurizada para uso humano como leche fluida y la cual ha registrado un incremento de producción del 7% más que el año pasado.
Aseguró que por esta razón no hay ningún argumento que establezca que existe un desabastecimiento de leche cuando la producción en este reglón es buena y atribuyó esta situación al comportamiento de los consumidores que por alguna razón se dispararon a comprar de los anaqueles más leche de la que generalmente llevaban.
De acuerdo con Peralta, los productores ordeñan todos los días, los que trabajan con grado A lo hacen dos veces al día y las plantas tienen un margen de procesamiento diario, por lo que los anaqueles se están surtiendo del producto fresco y no es aceptable que se diga que hay desabastecimiento.
Aceptó que se ha registrado un incremento en el consumo de la leche por el movimiento turístico y gran cantidad de personas que compran yogurt, queso y otros productos lácteos, pero reiteró que no hay tal desabastecimiento de leche en este momento.
Indicó que aunque hay un exceso en la demanda de los consumidores no se puede decir que no hay leche tomando en cuenta que en Panamá la mitad de la leche se importa y la otra parte se produce aquí y por esta razón no se pude decir que hay desabastecimiento de este producto.
Informó que además la leche internacional tiene un costo altísimo, casi el doble del precio de Panamá, lo que indica que si antes la industria panameña hacía algún tipo de producto con leche que viniera de afuera ahora tendrán que venderlo más caro.
Recordó a la población que la leche nacional es buena, barata y fresca; mientras que la que viene de otro lado es más costosa y tiene que venir en polvo para mezclarla, debido a que en el momento que hubo que incentivar para producir más leche se les pagaba muy poco por litro.