Los propietarios de tres lavanderías, ubicadas en Arraiján, fueron sancionados por el Cuerpo de Bomberos del distrito por poner en peligro la vida de los clientes.
Guillermo Sánchez, mayor de los camisas rojas, manifestó que los propietarios deberán pagar una multa por utilizar gas licuado de 25 libras para el funcionamiento de las lavadoras, aún sabiendo que está prohibido.
Alegó que para este tipo de comercios se recomienda utilizar tanques de gas independiente y deben ser ubicados fuera del establecimiento.
"Ya una asiática murió en un trágico accidente por estas anomalías. No queremos que se repita la historia, pues podrían verse perjudicados no sólo los propietarios sino un sinnúmero de personas que acuden a lavar su ropa", dijo.
Aseguró que intensificarán los operativos de inspección en diversos sectores del distrito de Arraiján y las personas que sean reincidentes ya no serán sancionadas sino que se les anulará la licencia de operación, porque se debe cumplir las normas establecidas.