De manera clara, contundente e implacable, los distintos participantes en el Concurso Nacional de Oratoria Cable & Wíreless- Meduca, formularon un preocupante diagnóstico de la realidad socio-educativa del país, proponiendo ideas, conceptos y proyectos para su transformación integral en pos de una educación de calidad sustentada en valores, acorde con las necesidades nacionales. Los oradores esgrimieron sus más elaboradas herramientas intelectuales en un ambiente pletórico de alegría, entusiasmo, respeto y sabiduría, procurando convencer al jurado calificador respecto a la calidad y elocuencia de su exposición. Al final alcanzó el primer lugar la joven Gabriela Cano de la provincia de Chiriquì, el segundo lugar Adriana Amaya de Colón, el tercero Eloy Núñez de Veraguas, el cuarto Daris Sáez de Los Santos y el quinto Betsayda Villalaz del Darién.
Luego de evaluar el contenido y el desarrollo de esta hermosa iniciativa, nos sentimos convencidos de que, por un lado, en nuestro país se está consolidando un movimiento de un sector empresarial que cada vez asume mayores compromisos respecto al bien común de la sociedad en base a un claro concepto de responsabilidad social, como muy bien lo señaló el Sr. Joge Nicolau de Cable & Wirreless. Por otro lado, la nueva generación que tomará las riendas del país a partir de la década del 20, demuestra gran inquietud frente a los acuciantes problemas nacionales, apego al orgullo patrio, al deseo de un Panamá mejor, desarrollado y justo, y sobre todo, conscientes de que el país necesita una visión de desarrollo sustentada en los grandes valores éticos y morales de la sociedad, cuyo pilar más importante es el capital humano que se moldea en los centros escolares.
Este concurso, muy bien organizado, contó con la presencia de destacadas figuras de la ciencia, el deporte y la cultura, que realizaron la presentación de cada uno de los oradores, dándole mucho brillo al evento. Estaban presentes también destacados políticos, que no escaparon de la atención de los oradores, a los cuales llamaron su atención respecto al cuestionado estado de cosas, exhortándolos a que hicieran algo para cambiarlo y atender sus recomendaciones.
Fue una excelente manera de conmemorar el mes de la patria escudriñando con optimismo los senderos del porvenir.