Un señor se molestó en un restaurante porque la empleada no escuchó bien y le sirvió mal.
Insultó a la empleada y gritó contra otras personas que le pidieron que se calmara.
Varios vimos extrañados la ira del sujeto. Algunos pensaron que a lo mejor estaba endrogado. Otros que trataba de dejar un vicio y eso alteraba su conducta.
Un joven estuvo a punto de golpearlo, cuando insultó a una dama que le solicitó que mejorara su conducta.
Manejando por Vía Porras, un tipo cruza peligrosamente mi auto. Y de inmediato él y su acompañante me insultan a pesar de que los irresponsables fueron ellos.
En calles y zaguanes de la ciudad, a cada momento, hombres y mujeres se "agarran a puños". No importa que haya cámaras cerca. Descargan su ira a manotazos y golpes.
A veces, padres de familia iracundos insultan y hasta golpean a un educador que trató de aconductar a su hijo.
Ni qué hablar de los políticos. A cada momento se insultan en público. Lo curioso es que no siempre agreden verbalmente al enemigo.
Vecino que antes se llevaban bien y mantenían la paz en el vecindario, de repente se convierten en enemigos. Peleas a gritos y hasta "halones de pelo" son más frecuentes de lo que Ud. cree.
¿Qué está pasando en Panamá?
Sabemos que para muchos la "vida está dura". Que algunos sufren desempleo, malos salarios, conflictos con sus parejas, etc.
Eso nos está demostrando que la calidad de vida en Panamá en algunos sectores se ha deteriorado.
También puede indicar que los panameños no sabemos actuar ante situaciones delicadas. Además, algunos no son capaces de controlarse y "estallan" por cualquier problema.
Las autoridades deberían preocuparse por esta realidad.
Expertos en cuestiones psicológicas pueden crear un problema para disminuir la ira en la comunidad panameña.
De nada valdrá a un pueblo tener millonarios edificios y otros modernismos, si cada día aumenta el descontrol de algunos ciudadanos.
No tomemos esto a broma. Da lástima ver cómo hay gente que convierte en un chiste esas expresiones de ira popular.
Porque ahora la ira es descargada contra otros ciudadanos. Sin embargo, de seguir la situación muy bien podría dirigirse la ira contra las autoridades.
De ocurrir esto, podría darse incidentes que romperían la paz social. Eso es algo que ningún Gobierno quiere, por más "locos" que sean...
