El italiano Valentino Rossi (Yamaha), que hoy se proclamó por novena vez campeón del mundo, dijo que, aunque el verano que viene decidirá su futuro, todavía se ve con fuerza para seguir porque le gusta pilotar motos y elogió a su máximo rival por el título, el español Jorge Lorenzo (Yamaha).
El italiano consideró que el español le ha hecho pelear hasta el final y ha sido un duro rival a lo largo del año. Afirmó que, aunque no eran como hermanos, Lorenzo había tenido un comportamiento de "chapeau" y elogió el gesto de éste de abrazarle tras la consecución del título en el circuito de Sepang, en el Gran Premio de Malasia, donde fueron tercero y cuarto, respectivamente.
Rossi manifestó que la carrera se planteó en una situación "muy difícil" por la tormenta que cayó antes de la misma. "Hice una buena salida, pero decidí ir tranquilo, entender la puesta a punto y los límites de la puesta a punto de la moto", dijo el italiano, quien afirmó: "Intente ir por Dani (Pedrosa, Honda) y vi que era peligroso porque iba muy rápido en algunos puntos del circuito".
"Durante la temporada he tenido grandes rivales y un montón de emoción, buena emoción. Todos hemos tenido problemas, algo que pone de manifiesto que hemos ido al límite y hemos batido muchos récords", recordó.
El italiano manifestó que uno de los momentos más importantes de la temporada había sido el adelantamiento que hizo en el circuito de Montmeló, en Barcelona, en la última curva a Lorenzo para ganar la carrera.