Seis turistas, entre ellos un niño de 10 años, y sus dos guías tailandeses murieron ahogados al ser barridos por una súbita crecida de las aguas cuando exploraban una cueva en un parque nacional del sur de Tailandia.
Las víctimas eran cuatro suizos, un británico y un niño alemán de 10 años.
El grupo realizaba una excursión a pie por el parque nacional de Khao Sok, en la provincia de Surathani, el sábado por la tarde cuando una súbita y aparatosa tormenta elevó el nivel del agua en la cueva subterránea, cercana a una cascada.
"Los turistas se encontraban dentro de la cueva y desconocían lo que ocurría en el exterior, por lo que quedaron aptrapados", dijo la policía.
Una turista británica, que sobrevivió al agarrarse al techo de la caverna, fue encontrada con vida tras una larga búsqueda, dijo Pichan.
El gobernador de la provincia, Winai Phopradit, ordenó el cierre del parque nacional durante la actual temporada de las lluvias.