El saldo fatal del síndrome desconocido se elevó a 21. Hay otros siete casos sospechosos, cuatro pacientes en cuidados intensivos y otros dos convalecientes en sala.
Después de una pila de análisis, las autoridades de Salud no tienen nada, salvo la decisión de suspender el uso del Lisinopril Normon, un medicamento para hipertensos que tomaban seis de los 21 fallecidos.
El ministro Camilo Alleyne descartó que se nombre una Comisión Independiente para investigar lo sucedido, bajo el argumento de que el Ministerio de Salud y el Seguro Social, son juez y parte en la crisis.
En anteriores situaciones como la del cólera, sobrerradiación, hantavirus y hemodiálisis, las autoridades de Salud han investigado, sin que eso descarta la instrucción de sumarios por parte del Ministerio Público, añadió.